1.- Abrir una cuenta de Gmail.
2.- Redireccionar todos los emails profesionales y personales a esa cuenta de Gmail.
3.- Olvidarse para siempre de Outlook y de esas otras cuentas y gestionar todo tu correo a través de Gmail.
4.- Disfrutar de todo tu correo (y contactos y favoritos y agenda y documentos y "feeds" y...) desde cualquier ordenador o dispositivo móvil.
Me fie de Alexis, aproveché el verano de 2007 en Harvard para hacer el cambio, y ahora no puedo estar más contento.
Se me ocurre una docena de razones más para pasarse a Gmail, pero me quedo con la decimotercera, que me ha llegado esta mañana cuando he abierto el correo: el nuevo video-chat de Gmail.
Podría explicártelo yo, pero mejor que te lo explique el creador de la aplicación:
Venga, vamos, ¡ya estás tardando demasiado en pasarte a Gmail!
No comments:
Post a Comment
Note: Only a member of this blog may post a comment.