Hace unos días, Gustavo Entrala me dijo esta frase y aparte de hacerme reír me ha hecho reflexionar.
La calidad de la sociedad en qué vivimos depende en gran parte de la calidad directiva en las empresas. Y la calidad directiva se construye sobre la calidad personal, que se manifiesta de una manera tangible cuando prestamos pequeños servicios a los demás.
Se me ocurre que un buen entrenamiento para tu calidad directiva de la semana que viene es prestar un puñado de pequeños servicios a tu familia y a tus amigos este fin de semana.
¿Vas a bajar la basura hoy? Piénsalo mientras escuchas a Sara Bareilles: